En el curso se estudiaron las incidencias de la vida cotidiana como cortes, quemaduras, atragantamientos, intoxicaciones y un sinfín de situaciones más, una de las más importantes que se aprendió fue la RCP (reanimación – cardio - pulmonar) maniobras sencillas para mejorar las posibilidades de supervivencia mientras se espera la ayuda especializada cuando se presenta una parada cardiaca.
Las clases fueron dinámicas ya que como apoyo contábamos con los muñecos de RCP para hacer las prácticas (uno adulto y otro pediátrico) además de diferentes documentales, videos explicativos y juegos interactivos.
